lunes, 28 de octubre de 2013

El velo de misa


Sip, lo que lleva puesto Patricia, mi Pepa pelirroja de ojos grises es un velo de misa.
Le tengo mucho cariño a este vestido, por diversos motivos.
Cuando recibí mi primera Nancy me entró de forma inmediata el gusanillo de hacerle vestiditos, y, andaba yo dando la tabarra a propios y extraños con entusiasmo digno de mejor causa a fin de conseguir telas. Fue a mi abuela a la que más incordié, hasta el punto de que terminó dándome incluso su viejo velillo para ir a misa que en los setenta ya había caído en desuso, y con el que le confeccioné este traje de noche a mi Nancy. Recuerdo que no tenía cierres ni cintas para los tirantes, así que tiré de imaginación e hice unos cordoncillos a base de hilo de coser para poder abrocharlo. Muchísimos años después le puse un cierre de velcro respetando los cordones, le añadí las lentejuelas y le hice un forro para que no se le transparentaran las piernas. También son muy posteriores el bolsito, la bisutería y la cinta con el botón dorado que luce.
Como decía, le tengo especial cariño a esta pequeña prenda, pues me devuelve parte de la ilusión y la felicidad que me proporcionó mi Nancy, y, sobre todo porque me recuerda a mi querida abuela y los momentos inolvidables que pasamos juntas mientras me enseñaba los rudimentos de la costura.







¿A que es bonita mi Patricia? Y eso que le he hecho un peinado tan estrafalario que la pobre criatura parece el ratón Mickey.



jueves, 24 de octubre de 2013

Nancy Pop


 Esta es mi Nancy Pop con piernas flexibles. La conseguí en la jugueteria donde suelo comprar. La dueña, -con la que tengo muy buena relación- haciendo limpieza de trastos en su almacén, encontró a esta niña todavía en su caja, y junto a ella, aparecieron también tres conjuntos de Lesly:  uno de finales de los setenta, y los dos restantes de principios de los ochenta; además de un ochentero de Nancy; todos en sus cajitas y en perfecto estado. Sabiendo de mi afición me lo ofreció todo por un precio simbólico. Si no me traiciona la memoria -que de esto hace ya bastantes años- pagué por el lote diez euros; una verdadera ganga.
La caja de la muñeca estaba tan llena de manchas de humedad que la tiré; un gran error por mi parte, pero estaba penosa y me daba grima verla y más todavía tocarla. El resto de cajas las conservo como oro en paño, junto con el catalogo que traía la muñeca y los que venían en las cajas de los conjuntos.
Las Nancys ochenteras me gustan menos que las de los setenta, y al principio no era esta una de mis muñecas más apreciadas, principalmente por sus piernas, que me parecen horrendas, pero, he aprendido a quererla y ahora recibe toda clase de atenciones por mi parte.
Luce un modelo copiado directamente del original Flores, a excepción del chal que he cortado triangular en lugar de con forma de capita.







lunes, 14 de octubre de 2013

Mañana de domingo entre granados


Ayer esta pequeña quiso salir a dar un paseo mañanero con su ropita nueva y su osito de trapo.
Los diminutos cuadritos creo que le sientan muy bien. He intentado que quedará un vestido muy infantil con un toque ingenuo; el enorme cuello plano contribuye bastante a darle ese aire que buscaba.








  
 
La chaquetita de punto es una de tantas de las que estoy tejiendo para que mis niñas no pasen frio este invierno. A pesar de que hacía una mañana preciosa, corría ese fresco tan agradable que nos anuncia por fin  el cambio de estación, y por eso, mi pequeña echó mano de su chaquetita azul.









Ella lo pasó divinamente correteando entre las piedras y cogiendo granadas, y yo, más todavia haciéndole muchas fotos.


jueves, 10 de octubre de 2013

Apaños para el Fantasía.

 Aguantando la respiración, que el vestido aprieta de lo lindo.

Hace unos días terminé de arreglar el modelo Fantasía; si, ese que a la pobrina Nancy le venia estrecho y corto.
Me ha dado unos cuantos quebraderos de cabeza  pues encontrar telas iguales ha sido imposible, así que me las he apañado usando cintas. Hay una ligera diferencia entre el color del vestido y las cintas que se aprecia más en las fotos que al natural.
Lo primero fue deshacer el volante y con la tela hacerle un añadido a la falda para darle el largo necesario. Para el volante he usado tres cintas de muselina: dos iguales para el cuerpo del volante y otra más estrecha para simular la cabecilla; van unidas entre si con un zig-zig muy pequeño que queda disimulado por el frunce.
El capitulo del forro lo he resuelto añadiendo cinta de satén; no es que sea la solución ideal, pero no he podido hacer más, y como el volante lo tapa bien (para eso lo he fruncido un poco más de la cuenta) doy por bueno el apaño. También he ensanchado el cuerpo todo lo que daban de si los escasos margenes de costura. Sigue siendo estrecho, pero, al menos, los bracitos le caben. Hay que decir que una hombrera es un poco más ancha que la otra, pero no he querido meterme a deshacer el cuerpo completo.

Enseñando los añadidos.

El écharpe que traía no me gustaba nada, y aprovechando que el volante es de distinto tejido le he confeccionado uno nuevo con la misma cinta y así parece que van a juego. La roseta también está hecha de muselina pues de satén me parecía que quedaba un poco pesada.

¡¡Niña, no arrastres el écharpe por los suelos..!!

Para redondear el conjunto he rematado la cadenita cinturón con unas cuentas de cristal, a juego con los pendientes y la peineta de fabricación casera.

¡Acaba ya, que tengo tortícolis!

¡Y que no acaba la condená!

El color del vestido me recuerda al famoso rojo Valentino por eso he mandado a mi niña a la Piazza di Spagna. La señorita luce así de glamourosa en la noche romana y a mi se me ha pasado el disgusto.

¡Valentiiinooooo, te necesito!

martes, 8 de octubre de 2013

Patrones del Pastora para Mirinda.

En mi corta andadura por el mundo bloguero he tenido la fortuna de conocer a un grupo de personas estupendas, que por su gran amabilidad me han hecho sentír cómo en casa desde el primer momento. Entre ellas se encuentra Mirinda, cuya calidez, talento e inteligencia hacen que cualquiera que la conozca la aprecie inmediatamente. Para ella son estos patrones del modelo Pastora.
Si le son útiles a alguien más, siéntase libre de usarlos.




Los patrones no llevan margenes de costura. 
La lineas discontinuas indican que hay que cortar con la tela doblada.
La falda y la enagua van cosidas juntas y unidas al cuerpo.

Detalle de la enagua.

He puesto todo mi empeño en que los patrones queden lo más afinados posible, pero no soy una experta, por lo que recomiendo cortarlos en papel de seda y montarlos para comprobar sobre la muñeca que no hay errores.
Si se imprime a tamaño folio salen exactos, no obstante he puesto la mayoria de las medidas para que sirvan de referencia.
Feliz costura, Mirinda!

viernes, 4 de octubre de 2013

Bebé rescatado del trastero.

Una sonrisa feliz
Recuerdo haber visto éste bebé encima de la cama de mi abuela desde que tengo memoria.
Supongo, que en un momento dado, muchos años después, me lo regalaría, imagino, que en un intento por despertar un interés por las muñecas del que en aquel entonces carecía una servidora. El muñeco se salvó de los generosos impulsos de mi madre regalando mis juguetes a traición, y acabó en el trastero, junto con otro pequeñin, una Swingy, y alguna que otra muñeca más.
El caso es que hace unos días arreglé el trastero y baje a las pobres criaturas a casa, que ya tocaba.
Aunque estaban bien guardados en cajas todos salieron de su encierro despeluchados a más no poder, y alguno -cómo este- con las ropitas en mal estado.
El caso es que, a pesar de que los bebés no son santo de mi devoción me produjo una inmensa ternura encontrarme de nuevo con ellos. Muchos recuerdos felices me vinieron a la mente cuando los tuve en mis brazos. Recuerdos de mi abuela, a la quise todo lo que se puede querer, y a la que, a mis años, todavía añoro y necesito cada día. Y lo dejo aquí, que me voy del tema.
Cómo decía, el bebé no estaba muy rozagante que digamos; tenía los pelos chafadísimos y enredados y la goma de la cabecita se había puesto un poco amarillenta, lo que contrastaba mucho con el color rosado del plástico del cuerpo. Para remediarlo probé el método que Facu_pop publicaba en esta entrada de su blog de tutoriales; he de decir, que con excelentes resultados. Es muy fácil, limpio y seguro si se siguen sus instrucciones. Desde aquí quiero agradecer a Facu su generosidad al compartirlo con nosotros. Gracias Facu :-*
También he tenido que retocar la pintura de la boquita que estaba un poco desgastada. He usado acrílicos mezclados hasta conseguir el color original. Estoy contenta con el resultado.
Los ojitos afortunadamente no han necesitado ningún arreglo. No así cómo el otro bebé, del que ya hablaré en otra entrada.
De la ropita, tan solo quedaba la camisita del jesusín de color verde que llevaba en origen. Estaba, como se puede ver, en muy malas condiciones; muy raída y deslustrada.

Lo que queda de la ropita original
Con un retal de piqué verde; un poco de bies de algodón y una picunela, le he confeccionado un jesusín nuevo basandome en el modelo original. Desde luego conservaré la camisolita, pues es cómo recuerdo haberlo visto siempre sentado en la cama de mi abuela.
En principio pensaba que sería un muñequito de feria, pero, en la parte de atrás de la cabeza viene marcado como bb ONIL por lo que intuyo que fue fabricado por Muñecas bb.
No sé su nombre, ni si lo tuvo en algún momento, ya que el muñeco no es de mucha calidad; tal vez sería un articulo menor que produjo el fabricante para bolsillos menos pudientes; lo cierto es que no tengo idea. Por lo que respecta a su datación me figuro que debe ser de mediados o principios de los sesenta, ya que lo recuerdo desde que tenía tres, o cuatro años, y soy de 1963. Si alguien puede aportar alguna información sobre él, la agradecería infinito.
Y bueno, que después de bañado, coloreado, peinado y vestido, mi pequenín -ó pequeñina- ha quedado tal que así.

El muñequito de goma estaba con él en la caja. No sé de dónde ha salido.

Necesito un nombre

Estoy bastante contenta con el resultado final. Desde ahora cuidaré mejor de éste peque. Lo prometo.

Edito para anunciar que este bebé ya tiene nombre, gracias a la amabilidad de María, del estupendo blog Muñecas y ratitos que localizó un muñeco de iguales características y pudo identificarlo.
Por cierto, el bebé se llama Luni y efectivamente es de Muñecas BB.
¡Gracias Maria!

martes, 1 de octubre de 2013

Estoy enfadada con Famosa.

Ayer me llamaron de la jugueteria donde suelo comprar mis Nancys: ¡por fin había llegado la esperada Nancy 45 Aniversario!

Mi niña todavía en su caja

Allá que me fui toda ilusionada pues ya me moría de ganas de tenerla conmigo, lo mismo que esos dos conjuntos que no pude tener cuando niña y que ahora estaban al alcance de mi mano.
Estaba doblemente contenta pues recordé que la ultima vez que fui por allí todavía les quedaban un par de ejemplares de Nancy Boutique, muñeca que no pude comprar pues iba muy justa de dinero en ese momento. Mientras caminaba a buen paso iba pensando que si aún estaban, una de ellas se vendría a casa, ya que había juntado un dinerito para mis caprichos muñequeros y era la ocasión de invertirlo.
Cuando llegué a la jugueteria, empezó -tal y como esperaba- la penosa tarea de hallar una Nancy con los ojos más o menos iguales. No sé si es que tengo mala suerte, o soy muy tiquismiquis, pero de las 10 nuevas que habían recibido solo dos tenían los ojos de igual tamaño y las pestañas colocadas más o menos en el mismo ángulo.
Abreviando diré que elegí la que me pareció mejor, que -todo hay que decirlo-, es una pelirroja realmente muy bonita y el vestido Gran Gala que lleva no está nada mal tampoco, aunque la tela de las braguitas tenia unos enormes rotos y me han tenido que dar las de otra muñeca.
Para mi alegría todavía tenían las Boutique, así que también me quedé con una ellas. Estaba yo tan contenta con mis nuevas niñas que ya puesta y renunciando a una prenda de vestir para mi les compré los dos conjuntos.
Estaba impaciente por llegar a casa y liberarlas de su prisión, y sobre todo quitarle a la pobre Nancy Boutique ese conjunto tan espantoso que lleva y vestirla con los nuevos.
En estas estaba yo, desnudando a mi niña y prodigándole toda clase de mimos y ternezas cuando veo que tiene el culete, la espalda y el cuello manchados de negro por la zona donde el velcro toca la muñeca. Primer disgusto.

La pecosita que no pudo ser

Allá que vuelve Tabhita a la jugueteria con intención de cambiar a la niña por la otra, que -pobrína- estaba todavía peor por lo cual me fui a casa sin ninguna. Y así es como me he quedado sin mi pecosa. Mi gozo en un pozo.
No se si os ha pasado, pero el plástico de las ultimas Nancys se mancha irremediablemente cuando las vistes de negro o con colores oscuros. Sobre eso ya contaré la historia de mi pobre Nancy Novia en otro momento.
Ya de vuelta en casa, y con mucha pena por haber tenido que renunciar a mi pecosita, me dediqué a sacar los conjuntos de sus cajas para probárselos a una de mis comunioneras. Otro disgusto. Y van.
Debo decir que los conjuntos han supuesto toda una decepción a pesar de lo cuidado de su presentación.

Fantasía: que no os engañe su aspecto

Hippy: por dónde pasa moja

Para empezar: huelen a moho; juro que no exagero, huelen como si hubiesen estado guardados en un sótano húmedo y polvoriento. Y no es lo peor, que con airearlos será suficiente. Espero.
Para seguir: la confección es bastante descuidada para el precio que tienen: 27 euros cada uno. Lo entendería en un articulo más barato, pero por ese precio deberían haberse esmerado más. Entre las seguidoras de Nancy hay excelentes modistas que hacen verdaderas maravillas por precios mucho más asequibles y con materiales de primera calidad. Famosa debería tomar nota.
El Hippy no es que sea una maravilla; el pantalón es de una tela basta como la lona, y encima no incluye zapatos, pero bueno, tiene un pasar; al menos le vale a la muñeca, cosa que no se puede afirmar de el Fantasia.
Si, damas y caballeros, el vestido le queda cortisimo, concretamente muy por encima del tobillo, y hasta dónde yo sé éste vestido debe cubrir los pies de la muñeca. Con eso puesto la niña podría ir tranquilamente a pescar cangrejos en el Misisipi sin miedo a mojarse el bajo de la falda.

Preparada para vadear el río

Y no es solo eso, pues los bracitos le pasan a duras penas y todo el vestido en conjunto le queda muy justo. El material también es decepcionante; es una especie de malla con un aspecto muy de baratillo, que además se engancha con una facilidad pasmosa. No he tenido nunca en las manos el modelo original de los setenta, pero al menos en los catálogos y fotos que he visto la tela aparenta más calidad. En la confección también se han cubierto de gloria; por no tener, no tiene ni dobladillo en el forro, y los del volante los ha resuelto con un zig-zag bastante cutre y descuidado.

Nancy, víctima de un vahído después de mirarse al espejo

El écharpe ni siquiera está cosido y vuelto; simplemente han doblado la tira de tela y le han hecho el zig-zag de marras a todo alrededor; entre eso, y que la tela tiene menos caída que un saco de arpillera resulta una verdadera birria.

Nótese lo primoroso del acabado

Y sigo con el capitulo de los zapatos: tienen la suela abombada, por lo que la muñeca no tiene estabilidad y es imposible mantenerla en pie. No sé si  he tenido mala pata y me ha salido tarado, o si todos están igual.
En cualquier caso no recomiendo a nadie que los compre, sobre todo el Fantasía. No valen lo que cuestan ni de lejos. Eso si, traen un colgante esmaltado con el que más vale que no te caigas si lo llevas puesto, pues lo más fácil es que se te clave en la yugular y mueras desangrada. Se lo podían haber ahorrado a cambio de hacer unos conjuntos algo más dignos.
Me siento completamente decepcionada, es más, en este momento me siento hasta estafada y así me gustaría hacérselo saber a los responsables de Famosa. Sinceramente, dudo mucho que vuelva a comprar otra Nancy o cualquier articulo relacionado con ella. Lo sentiré infinito, ya que me apasiona su mundo, y aunque no me sobra el dinero, ni mucho menos, siempre hago un esfuerzo económico para aumentar mi pequeña familia muñequil.
Somos muchos los que amamos esta muñeca y esperamos con ilusión cada novedad que nos proponen, pero si Famosa no mejora la calidad de sus artículos, que por otra parte, no son precisamente baratos, terminaran por perder la confianza de buena parte de sus clientes, como ya han perdido la mía. Personalmente estoy cansada de ojos bizcos o de distinto tamaño; pestañas mal colocadas; pies que varían ligeramente de talla según la muñeca con los consiguientes problemas para calzarlas; diferencias de color entre las diversas piezas; materiales que se manchan con el simple roce de una tela oscura aunque sepas con seguridad que no destiñe y otras pifias de ese estilo.
Tal vez da la impresión de que soy exagerada y que no es para tanto, pero siento que a veces nos toman el pelo.
Me pregunto con qué fabricaban la Nancy de nuestra infancia, esa que sacabamos hermosa e impecable de su caja y con la que jugabamos hasta el cansancio; y que a pesar de someterla a toda clase de trajines se mantenía siempre perfecta.
Supongo que he soltado toda esta infumable parrafada como un desahogo más que otra cosa.
Nada, que se me ha amargado el 45 Aniversario. En fin.